¡Viaja seguro con tu mascota!

Este mes celebramos el Día Mundial de los Animales y sabemos lo que significa que una mascota forme parte de nuestro hogar. Definitivamente se ha ganado el corazón de toda la familia e incluso la consideramos parte de ella. Por lo tanto, también merece nuestra protección en cualquier viaje que nos acompañe.

Según la Dirección General de Tránsito (DGT), como conductor de un vehículo debemos garantizar nuestra seguridad y la del resto de ocupantes, esto también incluye a nuestra mascota. Por ello, debes tomar en cuenta estas medidas de seguridad para que tus pasajeros tengan un viaje tranquilo y lleguen sin inconvenientes a su próximo destino.

Ten en cuenta el tamaño de tu mascota

Esto te ayudará a conocer la forma adecuada de transportarla. Si tienes un gato, conejo, perro o cualquier otro animal de tamaño pequeño, te recomendamos trasladarlos en su jaula o un kennel y colocarlos en el suelo del vehículo. Esta medida evitará que tu compañero se mueva o incluso se lastime mientras conduces.

En el caso de tener una mascota grande, lo más aconsejable es que viaje en el sillón, pero con las medidas de seguridad adecuadas. Como tip extra, coloca  fundas protectoras para los asientos para que no se deterioren o el pelaje se adhiera a ellos.

Usa arnés o cinturón especial

Al llevar a tu mascota suelta no solo pones en riesgo tu seguridad sino también la de tus acompañantes, sobre todo si es inquieta. Esto porque además de distraerte, puede mover alguna palanca del vehículo. Por eso, te recomendamos utilizar un arnés o cinturón especial para mascotas y asegurarlo en el broche de tu auto.

¡No uses el cinturón de seguridad convencional! Si tu mascota se asusta o intenta tirar con fuerza, puede lesionarse o incluso asfixiarse.

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Toma descansos cada dos horas

Si se trata de un viaje extenso, detén tu vehículo cada dos horas para hidratar a tu pequeño acompañante, permitir que se estire y dejar que haga sus necesidades. Sin duda, ¡tú también lo necesitarás!

Es importante que durante el recorrido prestes atención a cualquier situación como vómitos, agitación, saliva excesiva y temblores para detener tu carro o buscar ayuda de un veterinario en caso de ser necesario.

¡No lo lleves en el baúl!

Esta parte del vehículo no está diseñada para transportar mascotas porque carece de ventilación y seguridad, así que tu peludito podría desesperarse, movilizarse de un lado a otro, sufrir mareos o incluso desmayos. 

Te recomendamos bajar un poco los vidrios o encender el aire acondicionado sin colocarlo al nivel máximo, ya que les puede causar problemas respiratorios o en las articulaciones en caso de que tengan una edad avanzada.  

Procura poner en práctica estos consejos cada vez que viajes con tu mascota, sin importar que sea un viaje corto o extenso. Un descuido podría ocasionar un percance que ponga en peligro a tu compañero de viajes, tus acompañantes y a tu vehículo. 

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