Existen algunos exámenes de rutina que debemos hacernos al menos una vez al año para conocer nuestro estado de salud y detectar afecciones a tiempo. Estos análisis identifican enfermedades mortales como el cáncer de seno. De hecho, también pueden determinar si el riesgo es mayor en diferentes personas.
¿Sabías que el cáncer de mama puede ocurrir tanto en hombres como en mujeres y ambos lo desarrollan de la misma manera? Según la OMS, entre el 0.5 % y el 1 % de los casos afectan al género masculino, mientras que 1 de cada 12 mujeres sufren de cáncer de mama a lo largo de su vida.
Esta afección se origina cuando las células mamarias comienzan a multiplicarse sin control y algunas crecen de manera anormal, formando un bulto o un tumor. Por eso, ¡no dudes en visitar a tu médico!
Es probable que hayas escuchado sobre el cáncer de mama, pero más allá de ser solo una afección existen distintos tipos. Estos se clasifican depende del área de la mama en donde se desarrollan las células malignas:
Carcinoma ductal infiltrante: las células se originan en el conducto mamario y luego multiplican los tejidos. Además, puede generar metástasis, es decir propagarse en otras áreas del cuerpo.
Carcinoma lobulillar infiltrante: se refiere a que las células se desarrollan en las glándulas que producen leche y se esparcen hacia los tejidos mamarios cercanos.
El carcinoma ductal in situ: significa que las células que cubren los conductos mamarios se han convertido en malignas, pero aún no se han esparcido al tejido circulante. A este tipo de cáncer se le considera no invasivo o preinvasivo.
¡Pon mucha atención a las señales de tu cuerpo! Este nos advierte cuando existe una anomalía. Observa detalladamente tus mamas y descarta los siguientes síntomas:
Protuberancia o inflamación
Irritación
Hundimientos
Secreción blanca o amarillenta en el pezón
Cambio de tamaño, forma o aspecto
Descamación o desprendimiento de la piel
Bulto en la mama o incluso en la axila
Primero que nada si identificas alguno de los síntomas anteriores o cambio irregular en las mamas, no dudes en visitar a tu médico lo antes posible. Lo primero que se realiza es un examen físico y este determinará si es necesario realizar pruebas adicionales.
También te recomendamos priorizar un examen de mama para la detección temprana del cáncer. De hecho, la Sociedad Americana de Cáncer recomienda que las personas mayores de 40 años deben hacerse una mamografía de manera anual y antes de esta edad, un ultrasonido mamario. Y tú, ¿ya te realizaste un chequeo de mamas?
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Existe una manera rápida y sencilla para que puedas hacer una autoexploración desde la comodidad de tu casa. Te recomendamos hacer este chequeo a partir de los 20 años de forma mensual y de 3 a 5 días después de tu período para evitar que las mamas estén sensibles o con hinchazón. ¿Lista? Solamente sigue estos pasos:
1. Colócate frente a un espejo con los brazos estirados hacia abajo y verifica que tus mamas tengan el tamaño, la textura y la forma correcta.
2. Levanta los brazos y observa si existe alguna diferencia como bultos o irregularidades entre ambos senos o axilas. Es importante realizarte este examen cada mes para detectar estas diferencias.
3. Ahora párate de perfil y asegúrate que tus mamas no presenten irregularidades.
4. Luego, recuéstate y explora palpando con movimientos circulares los laterales de cada seno.
Ten en cuenta que una alimentación sana en conjunto con actividad física son factores que disminuyen el riesgo de padecer cáncer de mama. Además, al contar con la cobertura de Roblemed y tras cumplir el período de espera de 3 meses, podrás realizar los chequeos médicos necesarios y te apoyaremos en caso el diagnóstico sea positivo.
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