El corazón es el motor de tu cuerpo que se encarga de latir segundo a segundo para que puedas disfrutar los momentos más importantes de tu vida. Sin embargo, por distintos factores como la taquicardia, el sobrepeso, la alimentación, el sedentarismo o incluso, los antecedentes familiares, este órgano puede fallar.
Cuando esto ocurre, te enfrentas a una situación de emergencia: un paro cardíaco. Es una afección en la que el corazón deja de latir de manera repentina. Afortunadamente, existen distintas formas para cuidarte y prevenir un susto que cambie tu vida. ¿Deseas conocerlas? Sigue leyendo y toma nota.
Según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de Estados Unidos, cuando haces alguna actividad física de intensidad moderada o vigorosa con frecuencia, reduces el riesgo de sufrir una miocardiopatía isquémica. Es decir, una afección que es causada por el estrechamiento de las arterias que suministran sangre al corazón, lo que en muchas ocasiones conduce a un paro cardíaco.
Por esta razón, elige un deporte que disfrutes y realiza al menos 150 minutos de ejercicio al día, según lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Con el paso del tiempo, notarás cómo tu corazón se fortalece y te llenas de energía.
Una dieta balanceada es la base para mantener tu corazón saludable. Por ello, es esencial que controles el tamaño de las porciones, comas más vegetales y frutas, elijas cereales integrales, limites la ingesta de grasas no saludables, optes por fuentes de proteínas con bajo contenido en grasa y reduzcas el consumo de sal, según Mayo Clinic.
No dudes en buscar apoyo con un nutricionista especializado para que te brinde un plan de alimentación adecuado según tus necesidades. De esta manera, reducirás el riesgo de un ataque al corazón o incluso, un daño cerebral.
También puedes consultar: La importancia de una alimentación saludable con un nutricionista
Fumar es un hábito que incrementa en gran medida el riesgo de sufrir un paro cardiaco y otras enfermedades cardiacas. Según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos, el consumo de cigarrillos puede dañar al corazón y los vasos sanguíneos de manera permanente.
Sabemos que dejar de fumar es un desafío, pero es un gran beneficio para tu salud. Ten en cuenta que por cada día que dejas a un lado esta costumbre, tu corazón se fortalece y el riesgo de sufrir un paro cardíaco disminuye. Si necesitas ayuda para dejar el tabaco, no dudes en buscar apoyo en profesionales de la salud y en tus seres queridos.
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Cada día es una oportunidad para cuidar la salud del motor de tu cuerpo y proteger tu regalo más preciado: la vida. No esperes a que ocurra un paro cardíaco para tomar las medidas preventivas necesarias. Por eso, considera adquirir un seguro de vida que brinde la protección que tú y tu familia merecen.
Si aún no tienes un seguro de vida, considera adquirirlo para resguardar a tus seres queridos en caso de que llegues a faltar. Con Seguro de Vida 360, además de tener cobertura por fallecimiento, también contarás con muchos beneficios más. ¿Deseas más información? Haz clic en la imagen de abajo y un ejecutivo se contactará contigo.