Mantener una rutina saludable que incluya una dieta equilibrada, las horas de descanso adecuadas y actividad física regular requiere de mucho esfuerzo y dedicación. Esto porque debes establecer horarios, planificar tu día a día o sacrificar ciertos platillos, por ejemplo.
Sin embargo, si inicias desde una edad temprana, se convertirá en una forma de vida sin hacer mayor esfuerzo y obtendrás grandes ventajas tanto para tu bienestar físico y mental como para tu vida cotidiana. ¿Deseas conocer cuáles son? Continúa leyendo.
Cuando descansas al menos 8 horas diarias, cumples con tus horarios de comida y haces actividad física, la fatiga se reducirá considerablemente. Esto se debe a que poco a poco ganarás resistencia, fuerza, los músculos también se fortalecerán y tu cuerpo estará lleno de energía para realizar tus actividades diarias.
La salud mental es ese equilibrio donde te sientes bien contigo mismo y con las personas que te rodean. Para lograrlo, además de comer bien y mantenerte en forma con ayuda de ejercicio, es necesario que sepas cómo manejar tus emociones tanto positivas como negativas.
Ten en cuenta que un estilo de vida saludable no se trata solamente de cuidar el nivel físico, sino también del emocional porque te sentirás mejor, tendrás una mejor actitud al enfrentar diversas situaciones y serás más productivo en tu trabajo o estudios.
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Una de las principales claves para lograr un sistema inmunológico fuerte es mantener un estilo de vida saludable. De hecho, según la organización internacional Care, los siguientes hábitos disminuyen el riesgo de contraer enfermedades:
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Mantener hábitos saludables tiene un impacto directo en tu longevidad. Al optar por alimentos nutritivos y realizar actividad física con regularidad, reduces en gran medido el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer. Además, el control del estrés y una adecuada gestión emocional contribuyen a un sistema inmunológico más fuerte, capaz de enfrentar mejor cualquier desafío de salud. No olvides que esta combinación de prácticas se traduce en una mayor esperanza de vida, permitiéndote disfrutar de cada etapa con vitalidad y alegría.
Los aspectos que influyen al momento de adquirir un seguro de vida son diversos, pero dentro de los más importantes podemos mencionar hábitos como el consumo de tabaco, alcohol o drogas, por ejemplo.
Sin embargo, al mantener un estilo de vida saludable, las probabilidades de que tu aseguradora autorice una póliza con facilidad serán mayores, ya que no serás considerado como una persona de riesgo. Con tu Seguro de Vida 360, puedes contratar tu póliza de $100,000 si tienes menos de 55 años y tu condición es saludable, no necesitarás pruebas médicas para su contratación. En caso contrario, es posible que tengas que pagar una cifra más alta.
¿Si tienes una condición médica, sobrepeso o fumas, tu aseguradora puede analizar el riesgo para ser candidato de un seguro de vida? Es posible evaluar estos riesgos, para lo cual se considera importante realizar un mejor análisis del candidato. Por lo consiguiente, es necesario solicitar información que ayude a determinar si es necesario recargar un costo adicional a tu póliza.
Adoptar un estilo de vida saludable es más que una serie de buenas decisiones; es una inversión en tu bienestar y en tu futuro. A medida que cuidas tu cuerpo y tu mente, te aseguras de poder disfrutar de la vida con plenitud y durante mayor tiempo. No dejes para mañana lo que puedes comenzar a hacer hoy por tu salud.
Protege tu vida y recuerda que adquirir hoy tu póliza es la mejor expresión de amor para los que más queremos. Puedes contratarlo desde los 18 años o incluso hasta los 70. ¿Deseas más información? Haz clic en la imagen de abajo para que un ejecutivo se ponga en contacto contigo.