En caso de que tu carro sufra una avería de gravedad en donde sea imposible seguir circulando es necesario remolcarlo a un sitio seguro, ya sea a un taller mecánico o a tu vivienda. De lo contrario, es probable que se encuentre en peligro de sufrir un accidente o incluso, las autoridades de tránsito te sancionen por obstaculizar las vías principales.
Hacer el traslado por tu propia cuenta supone grandes riesgos para tu vehículo, así que lo mejor es que utilices la cobertura de Asistencia Vial de tu seguro. Sin embargo, es importante que para prevenir un incidente o malentendido evites cometer los siguientes errores.
Uno de los aspectos más importantes para evitar daños a tu vehículo mientras lo remolcan es colocarlo en posición neutral y con el motor apagado. De esta manera, tu carro se encontrará en punto muerto, es decir, se desactivará la movilidad desde el motor hasta los neumáticos para que la grúa lo controle. Ten en cuenta que el volante estará más rígido de lo normal, así que necesitarás más fuerza para maniobrar.
Si tu carro es automático, ten mucho cuidado con las distancias largas y la velocidad del arrastre porque puedes ocasionar daños severos en la caja de cambios. Incluso, según DercoCenter, existen fabricantes que recomiendan en el manual que un remolque corto y a una aceleración no mayor a los 40 km/h no representa un peligro serio para tu compañero de viajes. ¡Así que no te apresures!
Los vehículos cuentan con lugares específicos para remolcarlo de manera segura y en la mayoría de modelos encontrarás tapaderas tanto en el bumper delantero como en el trasero. Solo debes retirar las mismas con mucho cuidado y colocar los ganchos correctamente asegurándote que queden lo más apretados posible.
¡El sistema de suspensión no es una opción! El motivo es porque podrás dañar piezas como las barras estabilizadoras o los brazos de suspensión, por ejemplo.
Al momento que el encargado de la grúa ajuste tu carro en la plataforma, es importante colocar la palanca de cambios en parking si es automático o en primera en caso de un mecánico. Sin embargo, lo que nunca debes olvidar es activar el freno de mano para evitar caídas, golpes no deseados o incluso que se desplace de su lugar, así que, ¡no lo quites! Te recomendamos seguir las instrucciones que te indiquen.
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Una de las sugerencias más importantes que te podemos compartir es que evites viajar a bordo de tu vehículo remolcado. Ten en cuenta que esta acción podría poner en riesgo tu vida en caso de que suceda un accidente. Por ello, lo ideal es que te ubiques dentro de la cabina de la grúa. ¡Puedes ayudar al conductor con la dirección de tu destino!
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Remolcar el carro por tu cuenta es una acción muy arriesgada. Por ello, la mejor opción es que consideres adquirir un seguro de vehículos que, además de cuidarte ante los accidentes de tránsito, también te brinde asistencia vial como el servicio de grúa con personal experto, por ejemplo.
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