¿Sabías que la Salmonella es más común que se desarrolle durante la época de verano? Si quieres evitar esta enfermedad en estas fechas es importante que conozcas cuáles son las pautas de higiene que debes seguir para evitar su aparición y cualquier posible contacto con la bacteria, en especial para proteger a los más pequeños del hogar. En este blog te contamos todo lo que necesitas saber al respecto, ¡sigue leyendo!
La salmonella o salmonelosis es una de las infecciones intestinales más comunes que pueden existir. Esta es causada por una bacteria conocida como salmonella y dicha bacteria se encuentra en los intestinos de los animales, principalmente en las aves de corral como las gallinas, el pollo, etc. Esta enfermedad afecta el aparato intestinal de la persona infectada y ocasiona fuertes diarreas, fiebre, calambres abdominales o escalofríos.
Es importante saber que en muchos de los casos la Salmonella no presenta mayores síntomas y si la persona infectada es alguien sano y fuerte se puede recuperar dentro de unos pocos días sin necesidad de recibir un tratamiento específico. Sin embargo, hay otras personas a las que sí les afecta mucho y sí necesitan de una intervención médica para controlar la infección, por eso es preciso proteger a los más pequeños y a las personas mayores de un posible contagio. De igual forma, hay que cuidar que no se generen complicaciones, pues si la infección se propaga más allá de los intestinos, entonces el riesgo de la enfermedad es mayor y diversos órganos pueden salir afectados.
Como toda infección, la bacteria de la Salmonella tiene un período de incubación que oscila de varias horas hasta dos días. La Salmonella puede tener dos tipos de afecciones: la fiebre tifoidea y la salmonelosis no tifoidea. Ambas tienen presencia de los síntomas que te enumeramos a continuación:
Náusea
Vómito
Dolor abdominal
Diarrea
Fiebre
Escalofríos
Dolor de cabeza
Sangre en las heces
Gastroenteritis vírica
Sin embargo, si se detecta que se sufre de la fiebre tifoidea es vital tener control médico, pues es una variedad de la bacteria salmonella que puede ser mortal y es más frecuente en los países en desarrollo.
La infección por salmonella suele ser producto de comer carnes, aves, huevos o productos a base de huevo que estén crudos o poco cocidos, pues estos están contagiados con heces. Los mariscos y los pescados pueden también estar contaminados si se obtienen de agua contaminada.
También es posible que una infección de salmonella tenga su origen en las frutas y en los vegetales, pues algunos productos agrícolas frescos, en especial los importados, pueden haber sido lavados con agua contaminada con salmonella.
Otra causa muy común y la cual debes evitar es en la cocina, cuando los jugos de la carne cruda de res o de ave entran en contacto con los alimentos sin cocinar, como las ensaladas.
Si quieres prevenir esta infección hay una serie de consejos que puedes seguir para evitar cualquier tipo de complicación:
1. Mantén los elementos separados: para evitar contaminación cruzada procura tener un espacio para las carnes y utilizar un cuchillo en especial para ellas. De igual forma ten un espacio especial para frutas y verduras y ten cuchillos y recipientes especiales para ellas.
2. Lavate bien las manos: Esta es la mejor manera de prevenir transferencia de bacterias.
3. No comas huevos crudos
4. No comas carnes rojas/crudas, de preferencia que estén bien cocidas.
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