No podemos comprar algo que no entendemos y mucho menos aprovecharlo, por eso es importante conocer las ventajas de tener seguro médico.
Una preocupante mayoría de usuarios de servicios de seguros y fianzas admiten entender menos de la mitad de los términos y conceptos relacionados con su protección, lo que impacta en la contratación y el nivel de satisfacción.
A medida que hay más clientes, crecen las opciones y por ende, la confusión para tomar buenas decisiones.
Hay personas que durante años han tenido y pagado una cobertura de salud de la que no entienden nada y que cuando necesitan un servicio piden más o se conforman con un mal servicio por desconocimiento.
Afortunadamente esta tendencia está acabando y la industria se está actualizando. Aquí te compartimos algunas variables que te conviene conocer.
Para saber si un plan se ajusta a tus necesidades, debes conocer desde el deducible, hasta la prima y cualquier cargo adicional.
Los expertos advierten: a mayor frecuencia de uso, tu prima se incrementará en la renovación por el incremento en la siniestralidad.
El plan de salud clásico incluye una red de centros de atención médica y otros proveedores que trabajan con la compañía y aceptan proporcionar sus servicios.
Los clientes pueden no usar la red médica de la aseguradora y luego presentar sus gastos para un reembolso convencional que será ajustado de acuerdo a lo razonable y acostumbrado que establece las condiciones generales de la póliza.
Muchos clientes no se dan cuenta de que el seguro no cubre todo y terminan pagando una factura mayor a lo calculado, lo que inevitablemente desequilibra sus finanzas.
Las condiciones por las que los pacientes acuden a una emergencia no permiten considerar el tema de los pagos y las facturas, por ello se recomienda leer con calma la póliza, para entenderla o resolver dudas antes de que se presente una situación de crisis en la que se requiera hacer uso del seguro.