Una de las primeras cosas que leemos en un contrato de seguros es el término “responsabilidad civil” y si aún no te queda claro a qué se refiere, te recomendamos seguir leyendo.
En la interacción humana nos topamos con este concepto de tipo legal relacionado con nuestras obligaciones como ciudadanos.
¿Y qué es responsabilidad civil? Es aquella obligación de responder por nuestros actos en caso de que de manera dolosa o sin intención causemos un perjuicio contra otra persona.
Si esta responsabilidad proviene de un contrato y éste no se cumplió, se trata de una responsabilidad contractual, pero si viene de algo en el que no hay contrato, por ejemplo una fuga de gas que causó daños a una vivienda vecina, hablaríamos de una responsabilidad extracontractual.
Para que un acto o una omisión de éste genere una indemnización se deben cumplir características como causar un daño, acreditar el hecho y tasarlo, es decir, ponerle un costo.
Para cubrir las consecuencias para las cuales no estamos preparados, un seguro puede ser de mucha ayuda, ya que la compañía contratada se encarga. Precisamente es su razón de ser, dar la cara por sus clientes en caso de que éstos tengan una responsabilidad en un acto.
El seguro de responsabilidad civil para un vehículo cubre los daños a terceros ya sea que el asegurado tenga o no la culpa.
El seguro de R.C regular también funciona de manera similar sólo que este va aplicado generalmente las empresas o viviendas.
Cuando vayas a contratarlo toma en cuenta el límite de responsabilidad para daños a propiedades y daños a personas.
Daños a propiedades: Cuál es el límite que pagará el seguro en los daños a vehículos o propiedades en caso de accidente.
Daños a personas: Cuál es el límite que pagará el seguro en gastos médicos de las personas que queden lesionadas a consecuencia de tus actos.
Por ejemplo si tienes un accidente con tu auto y golpeas otro vehículo, debe ser lo suficiente para pagar los daños de dicho vehículo y los gastos médicos de todos los ocupantes.
¿Qué no cubre un seguro de responsabilidad civil?
- Daños provocados a tu propio coche o lesiones del conductor pero todo dependerá de las cláusulas que especifique el contrato.
- Afectaciones a consecuencia de un accidente, como por ejemplo la pérdida de trabajo o los gastos de rehabilitación.
¿Y cuánto necesito?
Al adquirir una póliza hay límites predeterminados sugeridos por el asesor de acuerdo a tus necesidades específicas y hábitos de manejo. Habla al detalle de este tema con un agente de confianza, para que te oriente en este sentido.