Las enfermedades cardíacas están apareciendo, cada vez con más frecuencia, en etapas de la vida, donde antes eran raras. Investigaciones científicas concluyen que el corazón es el órgano que más sufre por el estrés de nuestro ritmo de vida por lo cual debemos cuidarlo todo el tiempo y no solo después de los 60.
Este órgano distribuye toda la sangre a todos los órganos, por lo cual no puede fallar y cuando lo hace, invariablemente afecta al resto del “equipo”. Y en cada etapa merece ciertas consideraciones. Aquí te diremos cómo prevenir una enfermedad cardíaca desde temprana edad.
Las enfermedades del corazón matan a más mujeres que el cáncer de mama, de ovarios y pulmón, así de contundente. La obstrucción de arterias puede empezar desde la infancia, pero también la prevención.
El 80 por ciento de las enfermedades cardiacas en las personas del sexo femenino son evitables con tres sencillos pasos:
Dejar de fumar. Un año después de dejar de fumar, el riesgo de enfermedades coronarias se reduce en un 50 por ciento.
Beber moderadamente. El consumo excesivo de alcohol está directamente relacionado con los ataques cardiacos a temprana edad.
Prevención. Conocer tus números, ritmo cardiaco, colesterol y nivel de presión será clave para tomar decisiones a tiempo. Es uno de los mejores hábitos saludables que puedes tener.
Aquí las cosas son más complicadas que a los 20 años. Hallar un equilibrio entre trabajo, familia y entorno social puede aumentar los niveles de estrés. La clave es:
Liberarse. El estrés no podemos evitarlo, pero sí podemos manejarlo. De la forma en que reaccionemos, lo veremos reflejado en nuestra salud.
Ejercitarse. Si no tienes una rutina de ejercicio, es un buen momento de aumentar la masa muscular.
Dormir mejor. El tiempo de dormir debe ser sagrado. Hacerlo menos de cinco horas por noche puede aumentar su riesgo de enfermedad cardíaca en un 40 por ciento.
El estilo de vida ya se ha estabilizado, pero el deterioro de las arterias se hace presente.
Aquí se presenta una exigencia física mayor combinado con un cansancio natural. Es cuando se suelen abandonar las rutinas de ejercicio, pero precisamente es cuando se necesitan más. También vale la pena:
Reforzar el entorno social: Tener amigos reduce el estrés y baja la presión sanguínea, así que es momento de fortalecer las relaciones.
Toma menos café: Hay una estrecha relación entre el consumo de cafeína y los males cardiacos, ya que es un estimulante de aumento de hormonas como la adrenalina y el cortisol.