¿Qué hacer en caso de apendicitis?

Sentir un dolor agudo en el abdomen es alarmante. Muchas veces, estos dolores se deben a algo pasajero, pero cuando el síntoma es persistente y se intensifica, es importante prestar atención porque podría tratarse de una apendicitis. Esta es una condición médica que requiere intervención inmediata y saber cómo actuar puede marcar la diferencia entre una recuperación rápida y complicaciones serias. 

En este blog, te guiaremos sobre qué hacer si sospechas que tú o alguien cercano podría tener apendicitis. Infórmate y prepárate para intervenir de manera adecuada ante esta situación de salud que puede presentarse de manera inesperada.

¿Qué es?

Se conoce a la apendicitis como la inflamación del apéndice, que se ubica al inicio del intestino grueso. La causa de esta afección es generalmente el taponamiento por material fecal, aunque también pudiera tratarse por un cuerpo extraño o por un tumor. Cuando no se trata, se desata una infección y existe riesgo de perforación, originando peritonitis, y el riesgo de muerte. La peritonitis es la inflamación del peritoneo, que es una capa delgada que cubre el abdomen y los órganos contenidos en el mismo.

¿Cuáles son los síntomas?

Al principio el paciente experimentará un dolor en la boca del estómago, acompañado de náuseas o vómito. Conforme transcurren las horas, el dolor se localizará en la parte derecha del abdomen, siendo más intenso e insoportable y puede aparecer fiebre. Cuando esto ocurre, es necesario acudir con un médico para evitar complicaciones, pues la calentura sumada a los otros síntomas es un signo de que hay una apendicitis en evolución.

Otro signo para detectarla es que cuando el paciente trata de caminar, el dolor incrementa. Lo mismo sucede cuando se va al baño. Tardíamente, se pueden presentar otros síntomas como escalofríos, tremores y diarrea.

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¿Cómo se diagnostica?

El paciente deberá acudir urgentemente con el doctor, quien realizará un examen físico y palpará la zona afectada. De ser necesario, podrá solicitar una radiografía y pruebas de laboratorio para complementar el diagnóstico. Se cuenta solo con 24 horas para diagnosticar y dar tratamiento a esta condición.

Tratamiento

En todos los casos se requiere forzosamente de cirugía para extirpar el apéndice y evitar futuras complicaciones. Por lo general, la operación se realiza mediante laparoscopia, que es menos invasiva y causa menor dolor en el paciente.

En la mayoría de los casos, solo será necesario estar internado un día para el procedimiento.

Un escenario de complicación es cuando el paciente llega a medicarse y el dolor desaparece momentáneamente, pero luego regresa. En este caso, se ha perdido tiempo valioso que puede traer consigo lamentables consecuencias, incluso la pérdida de la vida.

Recuperación

Tras haberse hecho la cirugía, el paciente habrá que tener estricta vigilancia en la alimentación los primeros 10 días, además de complementarla con un poco de ejercicio. Una vez transcurrido este tiempo, el paciente podrá realizar sus actividades cotidianas.

Si el apéndice es operado antes de que se rompa, la recuperación será breve, pero en caso contrario, llevará un poco más de tiempo, y en este caso los cuidados deberán ser más rigurosos, para evitar futuras complicaciones.

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La apendicitis puede presentarse de manera inesperada y su manejo oportuno es crucial para evitar complicaciones. Tener un seguro médico adecuado te proporciona la tranquilidad de saber que cuentas con respaldo en momentos de emergencia. Con este aliado, recibirás atención rápida y de calidad, asegurando que tú y tu familia estén siempre resguardados. ¡No esperes a que se presente una urgencia para valorar la importancia de estar bien protegido! 

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